CIRUGÍA DE LA NARIZ
La rinoplastia o cirugía de la nariz es una de las técnicas en cirugía estética que más pueden llegar a mejorar el aspecto del paciente.
La nariz está ubicada en el centro de la cara y por ello, es uno de los elementos más llamativos en los que nos podemos fijar. Puede su aspecto llegar a crear complejos importantes sobre la propia imagen.
Lo más habitual en nuestro ambiente es que el paciente se queje de una gran giba nasal y de una punta caída, la conocida “nariz aguileña”, en la que al paciente le molesta especialmente su vista desde el perfil. Otros problemas estéticos por los que se consulta son los puentes nasales anchos, una nariz desviada a nivel del hueso o de la punta, deformidades provocadas tras haber sufrido un traumatismo en el pasado, o incluso ya habiéndose realizado una rinoplastia que inicialmente no fue satisfactoria y necesite una cirugía de rescate (rinoplastia secundaria).
Llevar a cabo una planificación exhaustiva antes de la cirugía realizando medidas, analizando el tipo de piel, la calidad de los cartílagos, y los posibles lugares donde poder extraer injertos en caso de ser necesario es primordial.
Es importante una nariz bonita, pero una nariz natural que vaya en consonancia con el resto de la cara es fundamental.
Los pacientes habitualmente consultan por la estética, pero en ningún caso hay que olvidar que la nariz es un órgano fundamental para la respiracion. Exploraremos la funcionalidad, y la necesidad de realizar en la misma intervención alguna modificación para mejorar cualquier tipo de problema respiratorio que el paciente pueda presentar. La intervención se realiza con anestesia local más sedación o bajo anestesia general, según el caso.
Respecto a la cirugía, mayoritariamente la rinoplastia puede realizarse a través de los orificios de la nariz, lo cual presenta como beneficio, entre otros, una recuperación postoperatoria más rápida y no dejar cicatriz externa visible. En casos más complejos con deformidades importantes, puede ser necesario realizar una pequeña incisión de milímetros en la parte inferior de la nariz (columela), para poder acceder a todas las zonas y poder colocar los distintos elementos en una posición correcta. La cicatriz en esta última, sería pequeña y quedaría prácticamente oculta por la zona en la que se realiza.
En la Clínica del Dr. Torres, contamos con la tecnología ultrasónica (osteotomo piezoeléctrico) que en casos específicos puede ser beneficiosa. Con esta conseguimos realizar cortes en el hueso con una precisión absoluta según lo planificado.
Según el caso, será necesario o no colocar un taponamiento nasal, que en cualquier caso sería retirado en las primeras 24-48 horas, y/o una férula nasal de estabilización, que se retiraría a la semana de su rinoplastia. Tras la intervención se le explicarán y entregará toda la medicación y recomendaciones para pasar un postoperatorio sencillo y llevadero, además de por supuesto estar asesorado las 24 horas del día para lo que necesite.
En definitiva, una nariz bonita y natural conseguirá armonizar el conjunto de la cara. Si además corregimos cualquier problema de respiración conseguiremos un tratamiento combinado óptimo, ofreciendo así lo mejor al paciente.
